Amado Dios,
Hoy, te entregamos nuestras vidas y las ilusiones que anhelamos. En sencillez y gratitud, ponemos en tus manos la vida de nuestra familia, reconociendo que en tu cuidado constante encontramos refugio y protección.
Te pedimos, Dios amado, que nos mantengas a salvo del peligro y de las personas malintencionadas. Sabemos que la vida puede presentar desafíos y obstáculos, pero confiamos en tu poder divino para mantenernos a salvo y protegidos.
Ayúdanos a discernir entre lo que es bueno y lo que no lo es, y a tomar decisiones sabias que reflejen tu voluntad. Que nuestra paz y tranquilidad no se vean perturbadas por influencias negativas, y que podamos vivir en armonía y amor como familia.
Encomendamos este día a tu cuidado, confiando en que en tu amor y gracia encontramos la fuerza para enfrentar cualquier adversidad. Gracias por ser nuestra fortaleza y protección constantes.
Amado Dios, en esta humilde oración, te entregamos nuestras vidas y nuestras esperanzas. Te agradecemos por tu amor eterno y por ser nuestro amparo en todo momento.
Amén.