Amado Dios, hoy quiero darte las gracias por todas las bendiciones con las que Tú colmas mi vida y la vida de mi familia. Cada día que pasa, puedo ver Tu amor manifestado en las pequeñas y grandes cosas que nos rodean. Desde la paz que sentimos en nuestros corazones hasta las oportunidades que se nos presentan, todo es obra de Tu mano generosa. Por eso, con un corazón lleno de gratitud, reconozco Tu bondad infinita y me entrego a Ti, sabiendo que en Tu presencia encontramos todo lo que necesitamos.

Te pido que en este día y en los que vendrán, Tu luz nos guíe en cada paso que demos. Que seas Tú, Señor, quien ilumine nuestros pensamientos, decisiones y acciones, para que siempre caminemos por la senda correcta. Te ruego también que Tu protección divina esté siempre con nosotros, alejándonos de todo peligro y de cualquier mal que intente dañarnos. Que Tu sabiduría se derrame sobre nosotros, permitiéndonos discernir lo que es justo y bueno, para actuar siempre conforme a Tu voluntad.
Líbranos siempre de todo mal, Amado Dios. Que Tu amor sea nuestro refugio en los momentos de dificultad, y que en Ti siempre encontremos la paz y la seguridad que el mundo no puede ofrecer. Confiamos en que Tu mano poderosa está sobre nuestra vida, guiándonos, cuidándonos y bendiciéndonos a cada instante. Por todo esto, y mucho más, te damos gracias. Amén.