Amado Dios, gracias por las bendiciones con las que Tú colmas mi vida y la vida de mi familia. Tu amor y Tu generosidad han sido abundantes en nosotros, y por eso, hoy te doy gracias desde lo más profundo de mi corazón.
Por favor, haz que Tu luz brille en nosotros y a través de nosotros, para que podamos ser un reflejo de Tu amor y Tu bondad en este mundo. Que Tu protección nos cubra como un escudo, defendiéndonos de todo mal y peligro, y que Tu sabiduría nos guíe en cada decisión y acción.
Que Tu presencia sea nuestra guía y nuestro consuelo en momentos de dificultad, y que Tu paz que sobrepasa todo entendimiento nos acompañe en cada instante. Líbranos siempre de todo mal, y mantennos firmes en Tu verdad y Tu justicia.
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén.