Amado Dios, Tú mejor que nadie conoces mi vida y mis esperanzas. Tú sabes mis deseos, mis sueños y mis anhelos. Tú conoces mis debilidades y mis fortalezas, mis miedos y mis alegrías. Por favor, en este nuevo día, tómame de la mano y guíame por caminos seguros. Ayúdame a evitar los obstáculos y las trampas que puedan estar en mi camino.
Si es Tu voluntad, ayúdame a alcanzar mis metas y a realizar mis sueños. Dame la sabiduría y el conocimiento para tomar decisiones acertadas y para seguir Tu guía. Que Tu Espíritu Santo me llene de valor y me dé la fuerza para enfrentar cualquier desafío que se presente en mi camino.
Confío en Ti, Amado Dios, porque sé que Tú eres mi refugio y mi fortaleza. Tú eres mi guía y mi protector. Que Tu amor y Tu gracia sean mi roca y mi fortaleza en momentos de debilidad. Que Tu paz y Tu gozo sean mi porción cada día.
Ayúdame a crecer y desarrollarme en fe, esperanza y amor. Ayúdame a ser un reflejo de Tu gloria en el mundo que me rodea. Que este nuevo día sea un comienzo de bendiciones y prosperidad, que Tu amor y Tu gracia me acompañen en cada paso que doy.
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén.