Buenas noches, querido amigo/a. En este momento de serenidad, elevo una oración al cielo en tu nombre. Deseo de todo corazón que mientras descansas y entregas tu cuerpo al sueño reparador, Dios, en su infinita bondad, te susurre al oído palabras de consuelo, esperanza y fortaleza.
Que en los confines de tus sueños, el amor divino te envuelva y alivie cualquier preocupación, ansiedad o carga que puedas llevar en tu corazón. Que encuentres consuelo y paz en su abrazo eterno, permitiendo que su voz tranquilizadora penetre en lo más profundo de tu ser y disipe cualquier temor o inquietud.
Y al despertar, que tu corazón se encuentre en paz, renovado y fortalecido por la presencia de Dios. Que la tranquilidad y la confianza sean tus compañeras durante el día que se avecina, y que puedas enfrentar cualquier desafío con una fe inquebrantable.
Descansa ahora, confiando en que Dios vela por ti en cada momento. Que tus sueños sean un refugio donde encuentres sanidad, inspiración y claridad. Que tu descanso sea restaurador, y que al amanecer, te encuentres listo/a para abrazar un nuevo día lleno de bendiciones.
Buenas noches, mi amigo/a. Que los ángeles custodios te guíen y protejan durante la noche, y que la presencia de Dios te envuelva en su amor eterno. Descansa en paz, confiando en que todo estará bien.